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sábado, 20 de junio de 2015

Historia; tema: "el aire"



HURACANADA  PARANOIA


      Desde su casamiento en el 2034, Keanu vivía feliz con su mujer Aeris y su hija Iris. Keanu se había dedicado fervientemente al estudio de la vida humana así como del problema de la existencia, el conocimiento o la mente. Durante sus años de incansable investigación se había ganado a pulso el apodo de "rata de biblioteca" que incluso le enorgullecía. Su mujer calificó su obcecación como una enfermedad y decidió llevarle al psiquiatra. En el 2037 a Keanu le diagnosticaron esquizofrenia, un trastorno que le provocaba constantes delirios y alucinaciones. La relación con su mujer se deterioró tanto que llegó a odiarla, pensando que ella era la causa de su demencia. Aeris observaba aterrada el monólogo que su marido mantenía abordando temas insólitos sobre el ser humano, el conocimiento o la religión. Keanu desvariaba declarando que su propósito en la vida era descubrir la verdad. Una fría mañana de invierno de aquel mismo año  Keanu se despertó y tropezó con los cadáveres de su mujer y su hija, que yacían en el suelo. Tras la muerte de ambos seres queridos, Keanu se hundió en una profunda depresión que le obligó a estar encerrado en la inexpresiva habitación de un hospital durante más de un año. Para nada le sirvió ingerir pastillas y antidepresivos que parecían hacerle enloquecer más. La madre de Keanu se hizo cargo de él el largo periodo que duró su rehabilitación. Una vez éste se vio con fuerzas de volver a enfrentarse a la vida decidió mudarse al campo a vivir la vida de un ermitaño, pues pensó que le traería la tranquilidad y sosiego que necesitaba.

 

      Pasaba la mayor parte del día vagando por el bosque. El contacto con la naturaleza le hacía reflexionar sobre cuestiones de la vida humana que nunca llegó a comprender. Se preguntaba sobre la existencia de Dios, el origen y propósito de la vida, el conocimiento humano, etc. En uno de sus paseos creyó escuchar el rumor de una voz a lo lejos. Era casi imposible que fuera una persona pues la población más cercana se encontraba a más de veinte kilómetros. Prestó atención a las palabras que parecían saludarle y darle la bienvenida. Cuanto más soplaba el Viento, más claro se escuchaba aquella extraña voz. Al instante pensó que quien intentaba comunicarse con él no era ninguna persona, sino el propio Viento. Keanu era consciente de que aparentemente había superado la esquizofrenia pero no era así. Consideró que la soledad le estaba jugando una mala pasada y como eran las primeras palabras que escuchaba en mucho tiempo, decidió responder. El susurro del Viento le dijo que se había manifestado con el propósito de revelarle los misterios que tanto le inquietaban. Keanu, muy confundido, decidió continuar la conversación pensando ser testigo de algún tipo de revelación divina. El Viento le comunicó que él no estaba enfermo sino que lo estaban los demás, lo que le tranquilizó. Le propuso quedar de aquel día en adelante en ese mismo lugar para discutir las cuestiones que tanto le atormentaban.

      El Viento se proclamó emisario de un importante mensaje que se debía transmitir al conjunto del universo y en concreto a los terrícolas. Dijo que era necesario controlar el desarrollo de la vida en la Tierra pues desde su creación no había progresado en absoluto. El enfrentamiento que había provocado la existencia de creencias enemistadas entre sí o el ascenso al poder del capitalismo había provocado el retraso de la humanidad y a su vez, la intervención de los que fueron sus Creadores.

      En la segunda conversación que mantuvieron, trataron el tema de la existencia de Dios. El Viento aseguró tajantemente su inexistencia y Keanu le pidió una explicación. En primer lugar, el Viento argumenta que la recóndita posibilidad de la existencia de Dios rompería con cualquiera de las rígidas leyes de la lógica. Éstas dicen: "Todos los cisnes son blancos hasta que aparezca uno negro", es decir, Dios no existe hasta que aparezca o se presenten pruebas verdaderas de su existencia. El Viento alega que las declaraciones de los supuestos testigos de revelaciones divinas no lo fundamentan en absoluto. Tampoco la existencia de libros que se contradicen entre ellos son pruebas suficientes. El Viento defiende que un ser omnibenevolente no permitiría el sufrimiento. El Viento pidió a Keanu que difundiera tales argumentos irrefutables en su deseo de eliminar esas creencias de la mente humana. Keanu terminó convenciéndose de la inexistencia de Dios. Tuvo la certeza de estar cuerdo y de no sufrir ningún tipo de delirio.


      En la tercera conversación que mantuvieron el Viento indicó que el origen de la vida no se encuentra en la Tierra sino en otro lugar del Universo. El Viento le descubrió la realidad de una vida primitiva extraterrestre, algo así como a lo que los humanos llamaban "exogénesis". Explicó que la vida se había originado en un punto del espacio y luego se había extendido al universo entero por medio de asteroides. En este punto de la conversación la mente de Keanu no paraba de hacerse preguntas: ¿Quién
y cómo trajo la vida a la Tierra?, ¿Con qué motivo e intención?, ¿Por qué los extraterrestres de los que habla el Viento nunca se han querido manifestar?, ¿Cuál es el propósito de la vida?. El Viento, al leerle el pensamiento, se apresuró a responder a todas esas preguntas. Le explicó que los Creadores son los verdaderos dioses de este universo, cuya existencia se remonta a eones antes de cualquier insignificante explosión. Su propósito fue la extensión de la vida en el universo por medio de la colonización de sus planetas. Crearon las "semillas" necesarias para el desarrollo de la vida, compuestas de bacterias extremófilas, es decir, enormemente resistentes a cualquier condición adversa. Los Creadores necesitan de los Cuatro Elementos para comunicarse con sus creaciones: la Tierra, el Agua, el Fuego y el Viento; éstos, son los emisarios al servicio de los Creadores. Los Cuatro Elementos tienen la potestad de cambiar el destino de cada planeta y dirigirlo según las órdenes de sus superiores.

      En la cuarta y última conversación el Viento quiso esclarecer a Keanu cuál era el propósito y sentido de la vida en la Tierra. Le declaró que la raza humana era un simple experimento dirigido por sus propios Creadores. Un ensayo llevado a cabo con la intención de probar si este tipo de vida sería capaz de sobrevivir y prosperar eternamente. Los Creadores, por medio de diversas catástrofes perpetradas por sus emisores, intentaron avisar al ser humano de que se acercaba su fin. Ahora Keanu terminó de entender que el conocimiento y la conciencia humana estaban limitados pues su existencia era un mero experimento. El corrupto sistema capitalista, la existencia de falsas creencias y el desarrollo de ideologías extremistas solo sirvió al hombre para resguardarse del terrible mal que significaba su ignorancia.

      Keanu, todavía ávido de respuestas, sufrió  un desvanecimiento y cayó al suelo, golpeándose fuertemente con una roca. Lo veía todo negro hasta que, de repente, una luz blanca le deslumbró. Se dio cuenta de que el nuevo lugar donde se encontraba le parecía familiar. También conocía a la persona que estaba delante suya, Chris Luft. Se encontraba en la inexpresiva habitación del mismo hospital del que nunca salió. Luft, el médico que siempre le atendía, había envejecido mucho desde la última vez que le vio, momentos antes de entrar en coma. Hablando muy lentamente, Luft le informó que se encontraban en el año 2053, esto significaba que Keanu había pasado los últimos dieciséis años en coma. El médico le indicó que un ictus fue la causa de su estado de inconsciencia. Keanu se encontraba atónito, no daba crédito a las palabras del médico. Aterrorizado, le preguntó si la situación que estaba viviendo en aquel momento era verdadera o si estaba delirando. Luft le dijo que todo en aquel momento era completamente real pero que en ningún momento dejó de ser esquizofrénico. Luft se dio cuenta de que Keanu se encontraba en un momento de lucidez y aprovechó para informarle sobre la trágica noticia que llevaba guardando dieciséis años. El médico le dijo que él  fue quien mató a su propia mujer Aeris y a su hija Iris en un ataque de ira fruto de su enfermedad. Keanu, recordando lo vivido en su largo sueño, le dijo al médico que la humanidad no había sido capaz de progresar y que estaba condenada a una extinción inminente. El mundo no había captado los mensajes enviados por los Creadores, a través de la acción de los Cuatro Elementos. Luft, consciente de la paranoia de su interlocutor, decidió pedir ayuda. Cuando volvieron al cuarto se encontraron la ventana abierta y a Keanu en el borde hablando tranquilamente con lo que parecía ser la nada. Keanu, al percatarse de que venían a por él, se precipitó al vacío mientras aseguraba que el Viento le había obligado a sacrificarse y a servir eternamente a sus Creadores.




Darilio
05/04/2015

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